La mañana del 19 de julio, nada más levantarme puse en mi casa la radio, quería oir el 100.9 y ver que el ordenador aún estaba enviando la señal y que ésta se podía oir. Y si, no había sido un sueño. Bueno, la verdad es que lo tenía plenamente consciente. El tiempo que llevaba me había permitido hacerme a la idea.
Fui a la emisora (tenía que acostumbrarme, a la palabra “emisora”) y comencé a preparar lo que podía ser la nueva programación. Era consciente que estábamos en la segunda quincena de julio y poco había que contar. Nadie nos conocía pero tenía que hacer algo. Y lo que hice fue concertar entrevistas con algunas fallas. La primera de ellas fue Centenar de la Ploma de Catarroja quien con el apoyo de sus falleros les mostré la idea. Entonces el presidente era Fernando quien después sería conocido por el “Dilililí” quien después de un tiempo de separación volvimos a tener buena relación, puede ser que fuese porque se dio cuenta que nadie es tan bueno ni nadie es tan malo.
Emití varias entrevistas, recuerdo unas ocho y llegó agosto. Para entonces, esos primeros días de emisión en julio emitíamos música y una entrevista (mi buque insignia sin duda) a las 20,00 horas. Y en agosto dejé música nada más pero con identificativos de la emisora por si alguien lo iba escuchando que se acostumbrara. La música era pop de todos los tiempos sobre todo en español.
Lo cierto es que tengo que confesar que no tenía ni idea de por donde podía salir septiembre. Si que tenía un ligero concepto, pero no la forma de hacerlo.
Después de unas vacaciones forzadas porque agosto es imposible contratar nada y menos hacer entrevistas de fallas porque todos están fuera, o casi todos, mas que nada los niños, llegó septiembre.
Por la mañana estaba Dani que presentaba la música. Su estilo no se correspondía con el que yo quería y la libertad que le di no fue bien entendida. Bueno, creo que esto se lo puedo aplicar a muchos que no entendieron que una cosa era la libertad y otra era tomarse la emisora como su “corralito”, pero eso será otro cantar.
Por la tarde a partir de las 7 emitía un pequeño esbozo de lo que sería el magazine con entrevistas que grababa con una grabadora y que luego montaba con comentarios míos tras lo cual ponía la entrevista típica de falla. En total duraba sobre las dos horas. Los primeros programas recuerdo que me costaba tanto montarlos como el tiempo que duraba. Me tiraba desde las 4 de la tarde hasta cerca de las 7 y era cuando los ponía.
Entre aquellas entrevistas recuerdo una a José Luis Llorens que me recibió en su despacho de la Universidad y me marcó su camino en las fallas entonces como presidente de la falla Almirante Cadarso-Conde Altea y me sorprendí de que un presidente de Especial me atendiera con la amabilidad que lo hizo José Luis. Por cierto, un José Luis que protagonizó una pequeña anécdota en uno de los primeros coloquios posteriores.
También recuerdo la entrevista a Javier Vila que me la ofreció en mi coche por que apenas tenía tiempo y bajó de su casa. Esta entrevista fue con motivo de su participación en la Elección de las Cortes 2007 en la Plaza de Toros de Valencia el año antes de la lluvia. Luego, más tarde le pedí otra pero con la excusa de la boda no me la quiso dar, pero esto se lo recordé el primer día que vino a la emisora como invitado de un programa. El recapacitó, me lo reconoció y durante un tiempo mantuvimos una muy buena relación. Esta relación aún estoy esperando que me diga porque ha dejado de ser buena cuando el y yo nunca hemos tenido nada. Bueno, tengo que confesar que hace unos dos años, en el programa En Profundidad salió muy dolido porque cuando estaba hablando con Ferrán sobre el Himno Regional, Carlos Roig en el control entonces, le puso de fondo el Himno Regional… ¡cantado por Francisco! El cabreo que pilló Javier fue monumental y pienso que a fecha de hoy sigue sin perdonarnos que nosotros nos molestáramos con su actitud en antena y su enfado nada disimulado con el que siguió aquella entrevista. Entiendo que no le gustara, pero también entiendo que hay que estar a la altura y si alguien comete un error y pide disculpas que se entienda que no se ha hecho adrede. Pero bueno, igual con el tiempo se suaviza… o no. Lo que pasa que saliendo de jurado habitual, es de los fijos, espero que no visite nunca mi falla. Aunque este tema se merece un capítulo solo, me refiero a lo de los jurados y sus amistades/enemistades, que es uno de los muchos puntos que siguen sin gustarme nada de las fallas.
Cierto es que nosotros no estamos enfadados con el y si nos saluda lo hacemos con gusto, tanto es así que en el espacio de Raimundo Gómez “El Casal Fallero” utilizamos de fondo su canción titulada de la misma forma. No hemos cambiado por este hecho. Repito que espero que sea un pasaje más de un detalle que se repetirá a lo largo de estos capítulos con cierta frecuencia: las personas que se enfadan conmigo y luego, al cabo del tiempo, me vuelven a hablar como si nada, bien sea porque se han dado cuenta que no sirve para nada, bien sea porque el motivo de su enfado fue que le contaron sobre mi algo que no era cierto y luego lo descubrieron o porque yo, personalmente, le dije que eso que le habían dicho era mentira como me sucedió hace poco con una persona que en su momento contaré también.
Esto último es algo con lo que yo no contaba y que me tuve que acostumbrar aunque al principio lo pasaba mal. Era el que alguien me dejara de hablar por algo que había dicho en antena sobre esta persona. Aunque con el paso del tiempo me he dado cuenta que los que no me hablan o les molesta mi actitud de decir lo que pienso con sinceridad y sin condicionantes son los que mucha gente fallera piensa que están en el meollo del mangoneo fallero. Es cierto, cuanta menos estima y simpatía me tienen, mayor es su grado de mangarrufas que le acusa el populacho. No sé si será porque ellos saben que esto es así, o porque cuando ese mangoneo lo hemos publicado y se han molestado ha provocado que la gente compruebe que lo que se pensaba de él se ha confirmado. Y esta observación me ha venido sobre todo de los casales, de esas visitas que tanto me enseñan y me ponen en la realidad de las fallas más allá de la realidad que en ocasiones nos quieren hacer ver los que en lugar de servir a la fiesta se quieren servir de ella.
Pero bueno, después de esta confesión, volvamos a la historia de Música y Fallas Radio.
En la Plaza de Toros me acredité para vivir la despedida de Nuria y Lucia como falleras mayores 20006 y la elección de las cortes 2007.
Ese año fue muy especial. Fue llamativo. Félix Crespo nombra a 5 mujeres para que elijan una corte mayor, algo muy comentado y en varios círculos criticado posteriormente porque se dio un hecho que llamó mucho la atención. Varias de las “favoritas” que todo el mundo daba como “cortesanas” (palabra que en la edad media quería decir prostituta aunque también era persona componente de la corte del Rey y que en la actualidad se ha popularizado en Valencia como componente de la corte de honor) no salieron elegidas. Todavía resuenan en mi cabeza las palabras de Vicente Fayos conocedor perfectamente de los entresijos de la fiesta quien, por cierto, saldrá varias veces en estos capítulos, que dijo algo así como “este año se demuestra que la elección de las cortes ha sido totalmente a criterio del jurado” como queriendo decir que “veis como las favoritas no han salido” pero es algo que siempre me ha acompañado desde entonces y es mi idea de las cortes.
Si Fayos dijo eso ese año… ¡no lo ha vuelto a repetir! ¿Quiere decir que siempre hay cortes predeterminadas tanto mayores como infantiles en los años posteriores? ¿o quiere decir que hasta a ellos mismos le sorprendió la elección? ¿o que fue una forma de justificar esta corte que nadie se la esperaba?
Pero algo que he aprendido en estos seis años es que ¿Cómo se pude decir esta chica vale y esta no solo por la belleza si no hay normas?
Es cierto, la elección de las cortes es un concurso sin normas. Tu, de jurado, puedes elegir a quien quieras, sea mas guapa, menos guapa, mas adinerada, menos adinerada, mas alta, mas baja, mas delgada, mas obesa, mas joven, mas mayor, pero luego te criticarán por haber elegido a esta o a esta otra. Como se puede criticar a ninguna corte ¡si no hay normas!
El programa seguía y llegamos a octubre. Los devaneos del programa aún eran frecuentes. Las entrevistas de fallas junto con la información fallera de tan solo una hora era lo único que se emitía pero íbamos poco a poco llenando la programación de publicidad que es lo que al fin y al cabo da de comer a todos los medios de comunicación.
En octubre, Música y Fallas Radio aún no era conocida pero seguía su camino. Y llegamos a la tercera semana de octubre. Fue una semana clave. Fui a una falla, la de San Isidro, y conocí a su presidente. Bueno, volví a entrevistar a su presidente quien ya lo había entrevistado anteriormente. Y le comenté el proyecto que estaba poniendo en marcha. Cuando me dijo que su trabajo le permitía tener tiempo libre le invité a participar en el programa como co-presentador. Le gustó tanto la idea que al día siguiente, 18 de octubre de 2006, comenzaba el primer programa de Nuestras Fallas como magazine. Iniciaba su camino en Música y Fallas Radio VICENTE ALVENTOSA.
En el capítulo 4 hablaremos de la aportación de Vicente Alventosa en el primer año y el ascenso de la popularidad del programa Nuestras Fallas.
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