viernes, 31 de agosto de 2012

Capítulo 27. SE CIERRA UNA ETAPA. SE ABRE OTRA.

Y llegó julio. Un mes marcado como sabéis por las preselecciones y por las entrevistas a las preseleccionadas como suele ser habitual. Por ello los problemas se “disfrazaron” y no salieron tanto a la luz como cosas anteriores. Pero no había esa conexión que nos había caracterizado y que nos hizo tan populares dos años antes.

Aún así, tengo que reconocer que cara al público, los programas salían sin aparentar nada o casi nada. Y así me lo observaban gente cercana que conocía perfectamente lo que estaba sucediendo dentro.

Las retransmisiones de las noches se iban haciendo. Las entrevistas a las preseleccionadas se iban desarrollando conforme a lo previsto y nada parecía presagiar que esto se fuera a romper.

Algunos detalles daban cuenta de la poca ilusión con la que alguien trabajaba, como era dormirse en el micrófono y tener que sustituirle otro colaborador que se ofreció en vista del estado en el que vio a esta persona. Era verano, las noches eran tentadoras sobre todo si se pasaban con nueva compañía. Pero la falta de profesionalidad se podía ver acentuada por el mal ambiente que se vivía dentro de la emisora y derivó en un mes en el que se sacaron los programas a trancas y barrancas. Pero se sacaron.

Había pendiente una conversación para final de mes, antes de irnos de vacaciones pero sucedió en el mismo día dos cosas inesperadas.

Una fue que escuché una conversación de dos personas de forma inesperada y en la que estas dos personas creían que no las escuchaba. Es conversación me aclaró muchas cosas que si bien no tenía duda, siempre tienes la esperanza de que no sea así. Pero sin duda era cierto lo que se pensaba de mí.

La otra es que una persona cercana a la emisora se nos sinceró y nos puso al día de muchas cosas que desconocía pero que se intuía por el mal ambiente reinante dentro.

No diré que yo tenía la razón absoluta, pero si que tenía mi razón. Una razón que si se me explica, se me razona y se me hace ver que estoy equivocado puedo rectificar. Pero si en lugar de razonar lo que no estas de acuerdo te dedicas a pregonarlo y comentarlo con todo el mundo poniendo a la persona responsable a parir y no lo comentas con él, puede llegar el caso que esta persona se entere y es cuando tenga que tomar medidas.

La conversación que íbamos a mantener antes de vacaciones la pospuse para la última semana de vacaciones antes de incorporarnos a trabajar. Tenía que recoger mas datos para saber por donde andaba el tema. Lo acontecido ese día hizo que tuviera que recopilar esta información.

Y llegó esa semana en un mes en el que escuché cosas que hasta ahora no sabía.

Tuve una conversación con Vicente y tras ofrecerme una propuesta en la que el haría la parte digamos “bonita” del programa, me dejaba a mi la espinosa. Yo le dije que no, que de esta forma cada uno tendríamos un programa y eso no podía ser. Le vi manejado y teledirigido. El nunca me había dicho nada de eso. Pero sobre todo lo pensé cuando empezamos a debatir sobre las horas trabajadas y el trabajo que iba a realizar.

No discutí, le ofrecí que a partir de ahora haría sus 8 horas diarias con el sueldo según convenio y nada más.

El horario que entonces puse en el programa fue a partir de las 7 de la tarde. Era una nueva apuesta porque quería poner a las e de la tarde un magazine fuera de lo fallero. Pero eso no resultó como esperábamos y al poco volví al horario habitual.

Como el tenía que seguir su horario, le dije que estaría de 9 de la mañana a 2 de la tarde y de 7 a 10 de la noche. El programa seguía y a Vicente lo despedía a las 10 en punto. Así cumplía su horario.

Llegó el día de la elección de las cortes en Pabellón de la Fuente de San Luis. Él y otra persona me preguntaron si los iba a acreditar. Yo les dije que no. Uno por ser quien le estaba aconsejando sobre como tratar los temas y otro porque no quería que me dijera nada de las horas. Así que, como la elección era sábado por la noche, no lo acredité.

La sorpresa mía vino cuando los vi con una acreditación de otro medio. Mi indignación iba por dos partes. Por una el estaba trabajando para mi y como no le di acreditación se la pide a otro medio. Y por otra parte la delegación de medios quienes conocían perfectamente que Vicente trabajaba para mi y se la dan. Entonces yo me preguntaba ¿para que tanto pedirme los nombres, apellidos y DNI de los colaboradores de Música y Fallas Radio si luego a los demás medios les daban las acreditaciones como ellos quisieran? ¿No me podía sentir indignado por que solo era yo el “controlado”? ¿Por qué a mi si y a los demás medios no? Y es que ellos sabía perfectamente que Vicente trabajaba conmigo y sin embargo no les extraña que vaya con una acreditación de otro medio. Uno llega a pensar que si pero que también pensaban que sin él la emisora no saldría adelante y dándole la acreditación rompía mas nuestra unión. Era para pensarlo de verdad.

Lo cierto es que a partir del año siguiente las acreditaciones van personalizadas con nombres y DNI. El mensaje que envíe en el programa siguiente se ve que llegó perfectamente.

El malestar interno seguía avanzando. No había marcha atrás. Vicente, un valor importante de la radio se dejaba llevar por consejos erróneos y seguía su camino errante en la emisora. Todo esto hasta que llegó mediados de octubre.

Un día me llama una persona y me dice:

- Pepe, sabes que el día… es el cumpleaños de Vicente, ¿no?
- Si, lo sé. Cuéntame.
- Pues sus amigos (los que en junio le habían aclamado como un emperador en la falla Centenar de la Ploma, los que en septiembre llamaban para que me pusiera mas publi por la tarde porque por la mañana querían escucharlo a él) van a bombardear de llamadas el programa de la mañana y van a hacer algo parecido a lo de Catarroja pero en directo en el programa de la mañana.

Evidentemente no voy a decir quien era mi fuente. Pero era totalmente cierto pues lo contrasté con otra u otras personas.

Entonces, dos días antes de su cumpleaños tomé una decisión. Hablé con la asesoría y le pregunté si le podía dar tres días mas de vacaciones a parte de las que le dí en verano. Me dijeron que si, que no había ningún problema y que se lo diera por escrito.

Así lo hice. Le di tres días de vacaciones y el día de su cumpleaños no recibimos ninguna llamada porque le pedí al sustituto que no diera entrada a ninguna.

Ahí no quedaba todo. Cuando se iba a cumplir la mini vacaciones, el día anterior, me volvieron a llamar y me dijeron que lo que se había quedado pendiente por parte de sus amigos-oyentes lo iban a hacer ese día, el primero que volvía.

Si no quise que aquello se convirtiera en un pasteleo a nadie el día de su cumpleaños, menos quería que fuese dos días después. Así que volví a darle una semana más de vacaciones. Una semana que no se cumplió porque antes de que acabara me traía su baja voluntaria de la empresa.

Ese día de la segunda quincena de octubre finalizaba una relación que fue bonita mientras que se basó en la sinceridad mutua. Lo lamenté pero la emisora seguía y yo seguía. No podía bajar la guardia. Se que ahora cierta gente iba a ponerme en el punto de mira de los comentarios. Pero no me preocupaba pues sabía que el tiempo pondría a cada uno en su sitio. Y es hoy en día y cada vez estoy más convencido. Yo sigo haciendo Nuestras Fallas, el primer y único magazine de la radio dedicado exclusivamente a las fallas y ahora con más y mejores colaboradores. Casi tres años con ellos así lo certifica.

Se abría una nueva etapa. Si poner en marcha la emisora fue un gran reto. Ahora el reto era mayor. Demostrar que nadie es imprescindible. Y a por ello que me fui.

Como este capítulo ha ocupado varios meses de historia interna, en el próximo capítulo hablaré de cosas que paralelamente sucedieron en el exterior de la emisora y me refiero a temas falleros.

martes, 28 de agosto de 2012

Capítulo 26. DE VETOS Y HOMENAJES.

Ante de comenzar las razones que me llevan a escribir este capítulo tengo que decir que entre hecho y hecho está el día a día que no es llamativo. La sucesión de programas en directo, las retransmisiones de plenos y asambleas, las visitas a los casales, asistencias a actos de comisiones falleras, etc. Lo que sucede que, como todo en la vida, os voy contando lo más llamativo, lo que pienso que más puede atraer vuestra atención. Es decir, sin ser sensacionalista, contar lo que más puede que capte vuestro interés, que no es otro que el interés humano por las desgracias o por el morbo de sucesos.

Y dicho esto comento algo que se extendió durante un tiempo hasta que al final exploté. Sucede que en las exaltaciones de varias agrupaciones (en este punto siempre ha dependido de quien fuera presidente y que agrupación fuera, no con todas tenia el mismo acercamiento) iba a grabarlas y luego las emitía igual que hacía con algunas de juntas locales. Pero este año en Ruzafa no pude grabarla porque me pidieron que no lo hiciera por los presentadores. Me quedé sorprendido pero no hice nada más que recoger los trastos y marcharme.

Me comunicaron que los presentadores le dijeron al presidente entonces que si yo grababa ellos no presentaban. Lo que esto supone os lo dejo a vuestra opinión.

Más tarde, le dijeron lo mismo a la falla Portal de Valldigna-Salinas, y el presidente de la falla, Quique Sanchis, les dijo que su falla estaba abierta para todo el que quisiera ir. El no iba a condicionar nada ni le iba a decir a nadie que se fuera porque venían los otros.

Se sucedieron otros hechos similares, por ejemplo en la Taula de Serrans de la falla Serranos-Pza. de los Fueros donde el moderador de esta tertulia que se celebra un jueves del mes de julio les dijo que si yo la grababa el no presentaba la tertulia. La falla me lo pidió, yo me disgusté, incluso algún artista dijo que eso era censura y que se quería marchar. Yo le dije que no, que íbamos a seguir y así continuó la charla. Aunque las caras largas del entonces presidente y algún otro falleros fueron notables. Con esta comisión, la conversación que mantuve posteriormente, arregló el tema y desde entonces hasta hoy no he tenido problemas en grabar.

Otra comisión en la que pincharon fue en Santa María Micaela-Martín el Humano donde también moderaba el coloquio de Cacau i Tramusos uno de los presentadores de Ruzafa y les dijo lo mismo que a Serranos, entonces la postura de esta falla fue totalmente diferente. Lo tuvieron muy claro, tan claro como la falla Portal de Valldigna y le dijeron que ellos no cerraban la puerta a nadie. El que quisiera venir que viniera y el que no, que no viniera. Entonces la falla tuvo que cambiar moderador. Y yo lo grabé.

Quien si que hizo caso a una de estas imposiciones fue la agrupación de Rascaña y su presidente, Carlos Pradilla, no consintió que yo grabara un coloquio en la falla Primado Reig-San Vte. De Paul donde asistía Félix Crespo entre otros quien supo de esta situación y la verdad no quiso intervenir para nada. Otro disgusto que me llevaba, en este caso donde no lo esperaba.

Una sucesión de vetos que no solo no minaron mi moral. Lo que consiguieron es que yo los publicara a los cuatro vientos y fuera quitando caretas. Omito los nombres por que lo que quiero es destacar los hechos en una etapa muy difícil de la emisora y porque algunos de los que entonces me vetaron, hoy en día no tienen problema en que yo les grabe y emita su voz por mi programa. Solo quiero dejar constancia de lo que sucedió.

El hecho de que aireara estos temas hizo pública definitivamente una situación muy clara y era la división de los medios, los que me hablaban y los que no. Aún hoy en día quedan resquicios de esto hasta tal punto que hace un par de años que dejé de ir a actos donde me veía impuesto sentarme en la mesa de medios, porque lo que para ir a un sitio y no estar a gusto, lo mejor es que no vaya. Hablo de actos como la Gala Fallera, la despedida de las Falleras Mayores o la jornada de convivencia de Junta en mayo donde se despide el ejercicio, por eso a mi nunca me han dado ni el premio naranja ni el premio limón.

Por cierto, una curiosidad: ¿Es casualidad que, normalmente a quien le dan el premio limón suele ser una persona que no se lleva bien conmigo y el naranja es una persona con la que tengo muy buena relación? En los últimos años ha sido así.

Esta división de los medios ha trascendido hasta hoy en día y son varios los que tienen en cuenta este hecho. Pero como dije antes, es un tema que poco a poco se va diluyendo en el tiempo porque está visto que no lleva a nadie a ningún sitio.

A todo esto, dentro de la emisora sucedió algo que quiero contar.

Un día, me viene un colaborador de entonces habitual y me dice algo que me llamó la atención. Me invitó a una cena “Homenaje” a Vicente Alventosa por los malos momentos que estaba pasando a nivel personal. Es un tema tan personal que no voy a contarlo aquí. Aunque la naturaleza del tema no me daba a mi que lo estaba pasando tan mal.

Era una cena en el Expo Hotel y que teníamos que pagar cada uno 48 euros para el menú. Curioso, te invitan y tienes que pagar. Además si íbamos mi mujer y yo eran 96 euros. ¡Casi nada!

Yo, con algo de duda le dije que si, que vale. Aunque me quedé pensativo.

Llegué a casa, lo comenté, y al día siguiente hablé con dos de los supuestos organizadores que el colaborador me había dicho que estaban con el homenaje.

Casualmente, y digo casualmente porque entonces no me llamó la atención, pero después si y mucho, los cinco que organizaban formaron parte una año después de la empresa que le montó a Vicente la emisora efímera a su imagen y semejanza.

Después de hablar con ellos se me puso el sexto sentido en marcha ocasionalmente y al día siguiente le dije al colaborador que no, que yo no iba al homenaje. Tras una conversación de media hora con él me mantuve firme y le dije que no, que yo no iba a ir porque no entendía que se le tuviera que hacer un homenaje a un empleado mío que lo único que hacía era venir a trabajar todos los días como los demás empleados y que el no era ni mas ni menos que cualquiera de las otras seis personas que entonces tenía en nómina.

El malestar del colaborador fue grande y así me lo manifestó. Pero yo se lo repetí para que no quedara ninguna duda.

Os recuerdo que para entonces el tema dentro estaba muy deteriorado y no estaba dispuesto a aceptar algo que no me cuadraba. Yo pienso que un homenaje se hace a una persona que se va a ir después de un tiempo o por haber conseguido un logro especial fuera de lo común. Pero este último punto es muy subjetivo. Cada uno puede pensar lo que quiera y si uno piensa que ayudarme a levantar la emisora y tener la audiencia que teníamos era merecedor de un “homenaje” yo no lo veía así. Por tanto decliné la invitación.

Pues bien, el “homenaje” se canceló. Y yo alucinaba. ¿Por qué se ha cancelado? Si los amigos le queréis rendir un homenaje hacérselo, pero yo no voy a ir. No entiendo que hay de extraño en esto.

Las objeciones del colaborador fueron tan vagas y fuera de contexto que me dio la sensación de haber roto una confabulación o similar. Cosa que luego descubrí que algo así era. Y os cuento.

Semanas después se celebraba la entrega del premio del concurso “Gran Fallero 2” en el casal de la falla Centenar de la Ploma. En esta ocasión me volvieron a invitar pero no fui. Después de la experiencia de navidades en la primera edición preferí no asistir. Además de que el ambiente en el interior ya estaba bastante enrarecido.

Pues bien, esta entrega de premios más que una gala parecía que era una loa constante a lo bien que hacía todo Vicente y lo malo que era Pepe. Varios cogieron el micrófono y como en una terapia de grupo comenzaron a ensalzar lo que era, lo bien que lo hacía todo y lo poco reconocido que era su trabajo en la emisora.

Había gente que si que sabía de que iba, pero había gente que no y por lo que me contaron posteriormente estaban alucinados de lo que estaban viendo.

Como me enteré de todo, pensaban que había un topo entre ellos y comenzó una “caza de brujas” a ver quien me había contado todo. El problema lo tenían este grupo de oyentes que habían dejado de serlo para intentar apoyar a Vicente en su “depresión” por el mal momento personal.

Una vez más yo quedaba como el malo sin darme oportunidad alguna a que yo diera mi versión. Pero no me importó. Dejé que el tiempo pasara.

Ahí me dejaron claro que las intenciones del “homenaje” en el Expo Hotel eran ensalzar por parte de “sus amigos” a Vicente dejándome en evidencia delante de la gente que iban a invitar que he contado arriba. Es decir, afrontarme y que yo reconociera en público “lo bueno que era”. Una treta que les salió mal en una primera intentona y que después les volvió a salir mal en Catarroja.

Algunos de los que cogieron esa noche el micrófono ahora no quieren saber nada de él y si que quieren o han querido volver conmigo. Incluso, años después, alguno me ha confirmado todo lo que sucedió allí.

Pero había un detalle que todos olvidaban. Y es tan sencillo como que la emisora era mía y las decisiones las tomaba yo. Para bien y para mal. Y, por supuesto, no iba a permitir que nadie me dijera lo que tenía que hacer por imposición. No iba a permitir que unos cuantos oyentes me obligaran a tomar una u otra decisión. Si querían fabricarle a Vicente un nicho de popularidad no iba a ser a costa del dinero que yo tenía invertido para que esto funcionara. No iba a permitir que un “empleado” utilizara mi “empresa” para darse baños de masas a mi costa y encima tirar por tierra mi imagen. Llegaba julio y lo más prudente era esperar las preselecciones, que llegara el verano y después tomar una decisión. Una decisión que si ya tenía medio pensada al finalizar julio, tomé definitivamente a finales de ese mes.

En el próximo capítulo hablaré de lo que sucedió ese mes y las posteriores consecuencias. Quien le decía a Vicente que sin él Música y Fallas Radio se iría a pique estaba muy equivocado. Pero cada uno hace caso de lo que quiere. Lo que no me vale es que uno no tenga nunca la culpa de tomar decisiones equivocadas, sobre todo cuando eres una persona que suele tener la postura que se dice popularmente de “arrancá de macho y pará de burro”. Cuando esas “arrancás” duran como mucho un año y luego ves que la reincidencia de los hechos te dan la razón de las decisiones tomadas en su momento, te permite aprender mucho. Y como dijo Goya (el pintor) cuando tenía 80 años a un alumno: “Hijo, yo siempre estoy aprendiendo, nunca dejaré de hacerlo”

Capítulo 25. INTENTOS DE CIERRE

Los programas iban sucediéndose con relativa normalidad. Era abril de 2008. Los colaboradores venían los días indicados. Nuevas secciones se iban incorporando. Por aquel entonces recuerdo que venían Carles Andreu con las curiosidades relacionadas con las fallas en internet, Rebeca Valenciano con los actos de las cortes y falleras mayores, Angel Romero con fallas históricas, Paco Verdú entrevistando a artistas falleros, Jorge Fabuel con “Vaya tela” espacio dedicado a la indumentaria y así varios colaboradores que tarde tras tarde venían a hacer sus espacios en Nuestras Fallas.

Ya entonces, entre el inicio del programa a las 4 de la tarde hasta el final a las 10 de la noche y las repeticiones, podíamos decir que el programa Nuestras Fallas duraba desde las 4 de la tarde hasta las 9 de la mañana del día siguiente. Los sábados y domingos poníamos reposiciones de toda la semana. Era todo el día fallas y fallas con sus diferentes espacios. Algo que añoro y que me gustaría volver a tener. Aunque tal y como está la tesitura es complicado por ahora y en unos años. Pero la esperanza no se pierde.

Entre programa y programa la gestión comercial y empresarial seguía por las mañanas. Hasta que en una de estas mañanas sucedió algo:

- ¿José Antonio García? – oigo una voz masculina nada mas entrar en la emisora-
- Si. ¿De parte de quien? –Yo seguía escuchando con la puerta de mi despacho entreabierta mientras que la visita era atendida por la secretaria que entonces tenía-
- Soy (diré Roberto, por darle un nombre) de la Policía Local de Burjassot. ¿Podemos hablar con él?
- Un momento. – le contesta la secretaria-
- Pepe, pregunta por ti. De la Policía Local de Burjassot.
- Dile que pase.

Una persona que pasaba de los 50 años, vestida de paisano aunque era policía local se acercaba a la puerta de mi despacho, un despacho en el que podía controlar todo pero que en ese momento tenía mi puerta entreabierta y solo veía a través de los cristales el estudio en directo. En ciertas funciones de policía los encargados de llevar estas funciones no necesitan llevar uniforme, bien porque no lo requiere el cargo, bien por otra razón que desconozco. Pero nada más abrir la puerta nos sorprendimos mutuamente:

- ¿Pepe?
- ¿Si? ¡ hombre eres Roberto!
- ¡Pero que sorpresa! Como me ponía José Antonio García…
- Si, pero es que es mi nombre para Hacienda. Sabes que desde siempre me conocen por Pepe, jejeje.
- No lo sabía que eras tú. ¿Cómo estás?
- Trabajando un poco. ¿Qué te trae por aquí?
- Pues mira, no sabía que trabajabas en la radio. Ni que esta era tuya. Te cuento. Hace unos días una persona muy nerviosa al Ayuntamiento (su descripción no dejaba lugar a dudas de quien era, y era de un medio de comunicación) y nos pidió que viniéramos y te cerráramos la emisora. Nos quedamos mirando, algunos compañeros contuvimos la risa y le preguntamos que qué pasaba. Nos dijo que erais una emisora ilegal y que venía a que os cerrásemos. Le tuvimos que tranquilizar y decirle que nosotros no podemos hacer eso. Insistió en que se podía hacer. Nosotros le explicamos que tan solo podíamos hacer la gestión de pediros la Licencia de Apertura y poco más. Que nuestra función no es esa.
- ¿Y que pasó?
- Nada, tomamos nota y le dijimos que nos acercaríamos a ver en que situación estaba.
- Entonces… ¿quería que me cerrarais la emisora?
- Jajajaj, si, pero con una maneras que no te cuento. Cuando se marchó del Ayuntamiento fueron varios los comentarios en la concejalía de Urbanismo en el sentido de que parecía poseído. ¿Qué le has hecho?
- Pues la razón es esta. –Y le expuse lo que os he contado en otros capítulos en relación con los medios de comunicación bajo mi punto de vista-
- ¡Pues vaya! Tranquilo que el tema no tiene importancia.
- Menos mal que sois vosotros, jejeje, así estoy informado de primera mano.
- Me alegro de verte, y ya sé donde estas. Voy a seguir con otras visitas. Toma este papel y tráeme esta documentación con fotocopias y cerramos el caso.
- Gracias Roberto, yo también me alegro de verte.

La visita fue breve y me dejó bastante pensativo. Han venido desde Valencia a intentar cerrarme la emisora. A mi pueblo, donde vivo casi 50 años y donde conozco a mucha gente por las diversas actividades que he desarrollado y por el tiempo que vivo en mi pueblo, bueno en Burjassot, porque aunque nací en Valencia, en plena Alameda pero a los pocos meses mis padres se vinieron a vivir a la ciudad de Los Silos.

A ver Pepe. Han intentado cerrarte la emisora alguien a quien no le caes nada bien. Esta emisora es la que te sustenta el pan de tu familia para que luego me venga algún iluminado pidiéndome que no hable de temas personales que afecten a su trabajo. ¿Dónde estaba cuando me quería cerrar a mi? ¿Tengo que pensar en los demás cuando a mi me estaban dando por todas partes y nadie me defendía, ni siquiera cierta gente que estaba comiendo de mi casa?

El porqué estaba claro, no había ninguna duda. Pero de no estar de acuerdo con lo que hacía a intentar cerrarme la emisora… pues creo que dista mucho.

Este hecho puede que a más de uno de los que estáis leyendo esto os vaya dando una idea de algunos hechos que aún hoy en día puede que se vean reacciones que llamen la atención algo pero que obedecen a que tolero cosas pero no olvido que en un tiempo hubo quien se atrevió a venir a mi pueblo a quitarme lo que daba de comer a mi familia. Podría haber tomado medidas y haber iniciado una guerra que no nos hubiera llevado a nada más, aunque la guerra ya estaba declarada pero no quería empeorar las cosas. Los hechos que en el próximo capítulo relataré os dará una idea de la situación en aquellos momentos.

Lo que peor llevaba es que gente en la que creía que en su día podía confiar, encima le reían las gracias a los que estaban haciéndome esto. Y fueron momentos difíciles.

Aunque tengo que reconocer que cuatro años después de esta etapa, algunos siguen sin hablarme pero con otros la situación está más que olvidada. A veces me pregunto si es porque tras cuatro años de crisis ahora más que preocuparse por lo que hacen los demás, cada uno estamos pendiente de sobrevivir día a día, porque no podemos distraernos. Hemos visto como otros medios han caído. Por esto pienso que los que quedamos en pie (medios o programas) vamos a preocuparnos en sacar adelante lo nuestro y no mirar tanto a los demás.

Tal era el control entonces que estábamos pendientes de las publicaciones para ver si ponían algo de nosotros. Pero esto para mi era grande, muy grande. Toda la vida siendo lector, oyente y televidente de programas de fallas y ahora estaba pendiente si hablaban de nosotros. El cambio era tremendo pero me iba acostumbrando pronto, demasiado pronto porque a lo mejor si lo que esperaba leer u oir era bueno para nosotros, quizá el pudor hubiera hecho que nos costara hacernos a la idea. Pero la verdad es que lo que esperábamos no era precisamente nada bueno.

Pero ahí íbamos. Afortunadamente el hecho del Ayuntamiento de Burjassot fue un hecho aislado pero en un contexto de intento de derribo con acoso mediático incluido. Otra prueba más de supervivencia que nos habían puesto en el camino de una emisora totalmente libre. Pero una prueba que no sería la única, porque visto lo visto, a pesar de que constantemente se hacía alusión a nosotros de una emisora poco profesional, carente de credibilidad y de rigor y un montón de adjetivos en la misma línea, el control sobre lo que decíamos era total.

Lo más llamativo es que no dejaban de llamarnos emisora “pirata” por lo que comenté en el primer capítulo de las licencias de radio. Incluso recuerdo que en la Taula de Serrans de aquel año nos dijeron eso de una forma indirecta pero clara. Y digo que es lo más llamativo porque varios de los que nos llamaban piratas y otras lindezas, algún año después, en la creación de una emisora efímera plagiada de la nuestra perdieron el culo para colaborar con ellos e intentar que, con la puesta en marcha de esta otra emisora nos pudieran hundir. El tiro les salió por la culata y no fui yo quien me hundí.

Pero la credibilidad de los que me llamaban pirata quedó bajo mínimos cuando lo que a mi me criticaban lo ponían en marcha ellos.

No entré al saco de aquel episodio porque no valía la pena. Quien lo pudiera decir en ese momento se definía a si mismo.

Donde si que entré al saco fue en lo que en el siguiente capítulo os voy a contar sobre los vetos a ciertos actos. No os lo perdáis.

sábado, 25 de agosto de 2012

Capítulo 24. BEGOÑITA, MENOS NAVAJAZOS Y MAS PONERTE LAS PILAS.

Julio Tormo estuvo varias semanas haciendo un programa llamado “La hora de Julio Tormo”. Era semanal y en el comentaba lo que quería con su habitual locuacidad. Era víspera de la exaltación de Gloria y de Victoria.

Julio, estaba molesto porque la fallera mayor de Valencia no había ido a un acto, creo recordar que en Castellón cuando ellos siempre adaptan su agenda a los actos de Valencia.

Lo que el llamaba vertebración de la Comunidad Valenciana se estaba rompiendo.

El fondo del tema era una controvertida agenda. Fueron muchas las quejas sobre la agenda y siguen siendo numerosas. Incluso la Interagrupación tiene o tenía un proyecto para regular a que actos iban las falleras mayores y a que actos no. Aunque esto molestaba y mucho en Junta porque piensan que es inmiscuirse en una función que no les corresponde. Malestar que, curiosamente, comparte Pepe Chiralt quien, si hubiera sido presidente de la Interagrupación, hubiera parado de inmediato.

En el programa del 24 de enero de 2008 Julio criticó que la fallera mayor no asistiera a un acto de Castellón, creo recordar, y la poca previsión de la agenda gobernada entonces por Begoña.

En aquel programa, que se hizo por teléfono porque viajaba hacia Alicante, Julio terminó diciendo “Begoñita, menos navajazos y ponte la pilas”, en relación al reciente incidente que Begoña de la Concepción había sufrido con un presunto navajazo a las puertas de Junta. Un hecho que, una vez mas, se envolvió en un halo de misterio, como otros tantos incidentes o enfermedades de la vicepresidenta.

Cuando ésta se rapó el pelo casi a cero por un tema de una supuesta enfermedad (afortunadamente no era cáncer, de lo cual nos alegramos) y un delegado reprochó a Félix Crespo que saliese en el 9 de Octubre sin vestir de valenciana, Félix le dijo poco menos que no tenía humanidad. Y ahí muchos salimos con la sensación que Félix se había equivocado y toda la razón la tenía Miguel Gil que fue quien le dijo eso. Begoña, si no se podía vestir de valenciana porque se había rapado, pues que no saliese en la procesión cívica.

Volvemos a Julio Tormo. El programa siguiente, Julio Tormo vino al programa en directo y el día 31 de enero nos visitaba para hacer su programa como todas las semanas. La razón de que Julio hiciera este programa fue a invitación de Bernardo Morosoli quien pensaba que era un buen refuerzo para la emisora.

Lo primero que dijo es que se había sorprendido de la gran audiencia que teníamos y de la repercusión que tenía y que lo que él había dicho en el programa anterior fue la comidilla de la exaltación que se había celebrado el fin de semana anterior. Una exaltación por cierto que algún colaborador mio se la pasó en el bar poniéndome guapo.

Julio Tormo comenzó el repaso de lo que el consideraba que no se estaba haciendo bien justificando sus palabras.

Cierto que Begoña, como podéis leer en el capítulo 6, ha tenido la habilidad de estar en el medio de muchos meollos. Pero en este caso, Julio no hacia mas que decir en público lo que muchos pensábamos. Que la agenda no estaba todo lo acertada para una entidad como Junta Central Fallera merecía.

Ponía el ejemplo de que en esas fechas, Julio ya tenía en sus manos el programa de actos de Castellón y de Alicante para sus máximas representantes. Así de esta forma no se solapaba actos propios con actos de las otras ciudades como pueda ser Valencia. Y no era de recibo que justificara la falta de las representantes valencianas por haber sido avisada 24 horas antes cuando no era así.

Comparaba a Valencia con otras juntas locales. Por ejemplo, criticaba que en el Día de la Comunidad Valencia en FITUR, en Madrid, él se encontrara con la Bellea del Foc, la Reina de Castellón, la Reina Fallera de Burriana (que así se le conoce a la fallera mayor de ésta población castellonense) la Fallera Mayor de Sagunto y no estuviera la Fallera Mayor de Valencia. La excusa fue que por la noche se celebraba la Gala de la Pirotecnia, y dijo excusa porque el acto de Madrid terminó a las 5 de la tarde y perfectamente podía haber acudido y después venir a Valencia.

Otro renuncio en el que se pilló a la agenda fue cuando dijeron que la Fallera Mayor de Valencia no podía ir a la exaltación de la reina fallera de Burriana por estar enferma cuando la verdad es que estaba cenando en la falla l’Antiga de Campanar.

También contó que Lucía Gil no fue a la Galanía de Castellón porque estaba en el “Tirant de Lletra” de la falla Na Jordana. Julio reclamaba que con algo de buena voluntad se podían haber cuadrado los dos actos sin problemas. No hubo previsión.

Fue un programa donde durante más de una hora expuso en antena varios puntos de descontento con Begoña y su agenda.

Reclamaba que por qué no se podía decir que había sido un fallo de agenda y no pasaba nada. Porque tapar esas cosas con mentiras piadosas lo único que hacía era empeorarlo todo y crear confusión en la opinión pública. Una opinión pública que pensaba que cada vez que había un “desacierto” (me dicen que diga esto en lugar de “cagada”, que queda mejor) coincidía, desgraciadamente, con un incidente de Begoña, y eso era vox pópuli por aquel entonces.

Todo lo que decía Julio no hacia más que certificar mis palabras en programas anteriores en los que me extrañaban hechos como los que comenté con la entrega de premios del concurso Gran Fallero donde de un día para otro alteran la agenda para unos y a otros les cuesta Dios y ayuda tenerla aunque sea media hora.

Aunque media hora es lo que les gustaría tener a los sectores para poder realizar el intercambio de fotos. Un intercambio que se cambió a la forma que se hace ahora y que Julio Tormo criticó con dureza por la frialdad con la que se desarrolla. En el Palacio de la Exposición, con un horario tan ajustado que cuanto antes acabe cada sector mejor. Una tras otra van pasando las falleras mayores de las comisiones y poquito y rápido que si no se nos junta con el otro sector. Frio, frio, frio, decía Julio entonces y seguimos pensando muchos ahora.

Esta forma de hacer el intercambio no te permite ni cruzar una palabra de las falleras mayores. Es mecánico, casi marcial y no tiene ni emoción ni sensibilidad.

Una de las propuestas que reclamaba ya Julio Tormo fue la de poder partir las cortes y dotarlas de un protagonismo mayor del que tiene ahora quien hay quien piensa que son mucho más válidas para poder representar a la fiesta de lo que ahora se hace.

Son nombradas, salen sonriendo, se quedan en su sitio sonriendo, esperan que salga la fallera mayor, se hace el acto y se les despide de dos en dos. Ese es el cometido de las cortes. Y personalmente pienso que están capacitadas para mucho más. No en vano, el jurado que elije en septiembre a las cortes se supone que elije a trece falleras mayores ¿no?

Esto se hace en Alicante y no hay problema. Solo sería jerarquizar los actos donde puede acudir la corte fraccionada por su cuenta y donde la fallera mayor con o sin corte.

A todo esto se comentaba que según “como se portaban” las cortes salían más o menos, siendo que en alguna ocasión se les castigaba una semana sin salir. Pero esto, como la agenda siempre ha sido tan opaca no podemos certificarlo.

Esto es otra cosa que se reclama. La opacidad de la agenda debe de disminuir. Que se sepan donde van y donde no pueden por falta de tiempo.

Pero esto me da que se oculta para que la opinión pública fallera no sepa a que fallas van año tras año, incluso varias veces en un año, y a que fallas no van aunque las pidas repetidamente durante varios años. Que haberla haylas.

De hecho, cuando Miguel Galán cogió durante algunos meses la agenda, se publicaba a cuantos actos había ido y a cuantos actos no. Pero esto, nadie sabe por qué, duró muy poco. Además en ningún sitio se publica la agenda por adelantado para que los medios podamos saber donde van a ir, cuando yo recibo la agenda de, por ejemplo, los concejales del Ayuntamiento de Valencia cada día a las 9 de la mañana.

Claro, luego vienen hechos como el que descubramos que no las llevan a una falla (de sexta, eso si, las de Especial ni se te ocurra decirles que no) porque van a ver un musical o una película y luego cuando no van a Castellón se les llena la boca diciendo que las fallas de Valencia son antes. Esto sin contar cuando van a la inauguración de una tienda “VIP” de algún enchufadillo.

Esta queja ha sido continua en el tiempo y sobre todo, como dije antes, con fallas pequeñas. Aunque también hemos visto como algunas agrupaciones han sufrido este agravio. Tal fue el hecho en la agrupación Mercado de Jesús presidida entonces por nuestro compañero Ferrán Gil, quien no tuvo a las falleras mayores 2009 en conjunto para hacerle entrega de la insignia de la agrupación, solo tuvo a Marta. Aún está esperando que le expliquen por qué María Berbel no la enviaron cuando aquel día no tenía ningún acto.

Quejas continuas, oscurantismo en la agenda, quejas de ciertos padres con el comportamiento de Begoña y una larga lista de hechos se presume que fue la razón por la que ésta presentó su dimisión en octubre de 2010.

Aunque se cuenta que la verdadera razón que colmó el vaso fue un grave fallo de protocolo en la proclamación de Piti y Ariadna donde, cuando iba a empezar el acto, con la alcaldesa en el estrado junto a las falleras mayores, se dieron cuenta que el banco destinado a las cortes estaba vacío: ¡Las cortes aún estaban fuera del Hemiciclo!

No trato de decir que Begoña no hizo bien su trabajo. Solo cuento lo que Julio Tormo explicó en aquel programa (que aún conservo) y en el que explica todo lo sucedido.

Julio, aquel programa también tuvo palabras para los vicepresidentes quienes en bloque lo cogieron en la Gala de la Pirotecnia y éste se defendió como gato panza arriba y con su locuacidad conocida se los metió a todos en el bolsillo.

Bueno con su locuacidad y porque es amigo personal de Rita Barberá, Camps, etc. Y eso provocaba que si, que le llamaban la atención pero ¡ojo con tocarlo! ¿eh? Y eso para Julio era tener una posición cómoda. Y yo que me alegro por él. Porque si todo eso en lugar de decirlo Julio Tormo lo dice Pepe Herrero…

De hecho hubo "alguien" que me reprochó que Julio dijera eso. Yo le contesté que en mi emisora cada uno era libre de decir lo que quisiera. ¡Válgame Dios! No echaban la culpa a Julio, la culpa ¡Era mía! por dejarlo hablar. Tremendo. Cuando en la grabación que tengo de aquel programa solo habla él. aquella persona me dejó petrificado. Pero bueno, como los americanos cuando buscan un culpable: "si es negro o latino no hay problema en acusar a un inocente". Pues eso mismo pensé yo. Nadie se atreve a reprochar a Julio lo que dijo y me echan la culpa a mi por ¡dejarlo hablar!. ¡Claro! la culpa fue mía por no preguntarle de que iba a hablar. ¿Verdad? Nunca lo he hecho con nadie. Todos los que han hecho programa hablan de lo que quieran. Pero por dejar hablar a Julio yo era un cobarde. Sin más comentario.

Aún hoy en día sigo manteniendo una buena relación con Julio y le felicito porque después de dejar el programa “Cor de Festa” lo han cogido para que siga en antena con “De Festa en Festa”. Su colaboración fue muy válida.

En el siguiente capítulo contaré una serie de vetos en los que me vi inmerso después de las fallas 2008. Unos vetos que destaparon muchas cosas.

viernes, 24 de agosto de 2012

Capítulo 23. MOVIMIENTOS EXTRAÑOS.

En este capítulo tengo que hacer un paréntesis cronológico por la naturaleza de estos relatos. No es un libro al uso donde vayas leyendo capítulo a capítulo pues cada uno de los que escribo de inmediato os lo dejo en el blog-libro para que los vayáis leyendo.

Y digo que tengo que hacer un paréntesis porque los hechos que voy a narrar no sucedieron de acuerdo con el momento que estoy hablando, pero no desvirtúa para nada lo acontecido pues es una muestra mas de la importancia que tenía lo que decíamos y el intento de desestabilizar a la emisora. Una desestabilización que si que se consiguió en parte pero que no hizo que un servidor dejara de seguir la línea reivindicativa y de denuncia de injusticias que había tomado definitivamente desde el mes de noviembre de 2007.

El tema comienza una mañana a las 9. Recibo una llamada de una persona ajena totalmente a Junta, oyente habitual, que me llama. Por aquel entonces teníamos un teléfono móvil donde recibíamos mensajes de los oyentes pero que fuera de programa servía a algunos de ellos para ponerse en contacto con nosotros.

En la llamada me dice que en la noche anterior había habido una reunión urgente en Junta del presidente con los vicepresidentes por la dimisión de uno de ellos.

Yo, ingenuo de mi, llamo a la delegación de medios y pregunto. Me dicen que esto no era así, que la reunión no había existido y que eso era mentira. Cuelgo y doy el tema por zanjado. Si resulta que en la delegación de medios me dicen que no, pues lo doy por válido y ya está.

Varios días después, no acierto a recordar cuantos pero creo que es tan solo un o dos, recibo una llamada de un vicepresidente bastante exaltado, nervioso y con acusaciones hacia mi que eran mentira.

Yo me quedo sorprendido y le digo que respire un momento y me explique que es lo que pasa con tranquilidad.

- ¿Qué a que estás jugando? Que estás diciendo que voy a dimitir y eso es mentira. Que ya está bien de que digas mentiras.

Yo alucinaba. Me costó entrar en materia porque no sabía por donde iba, es más, no recordaba lo de la llamada y le dije que no era cierto. Que yo no había dicho nada, solo que recibí una llamada y para contrastar me puse en contacto con la delegación de medios quien me dijo que no y cerré el tema.

- Pues si que tienes que haber dicho algo porque me dicen que lo han comentado Gabi Aranaz (delegado de medios), Julio Torras (Vicepresidente de Nou Campanar) y Rafael de Lázaro (presidente de la agrupación Mestalla-Benimaclet por aquel entonces).
- ¿Qué quien te ha dicho que? Eso es mentira, de verdad, que no he comentado nada.
- Pues entonces ¿por qué van diciendo eso?
- Que yo no lo sé. Si estas personas han dicho es que te digan quien se lo ha dicho porque yo no he hablado con ellos para nada.

La conversación quedó no muy bien porque parecía como si yo quisiera mentir al vicepresidente (que ahora ya no lo es) y dejarle en mal lugar.

Ni corto ni perezoso, al día siguiente llamo a los tres, uno por uno. Yo pensaba que a mi no me toca nadie las narices ni me mete en fregaos que yo no tengo nada que ver.

Llamo a Gabi y me lo desmiente, llamo a Julio y lo mismo con el consiguiente cabreo de este porque se hacía cruces, llamo a Rafael de Lázaro con quien apenas me unía relación y también me lo niega.

Llamo al vicepresidente y le digo que he hablado con ellos y que eso es mentira. Este suaviza su postura respecto a la tarde anterior e intenta que el tema se zanje.

Para el y para mi si que se había zanjado, pero para Julio Torras parece que no y se presentó en Junta para aclarar el asunto. Iba cabreado y parece que esta actitud de Julio Torras hizo que tel tema no llegara a más. Pienso que no esperaban que me moviera de la forma que lo hice. Igual es que no estaban acostumbrados y yo no iba a agachar la cabeza y dar la razón por quien era. Igual es que esta persona no pensaba que un “don nadie” se iba a revelar.

Nadie había sido. Nadie había dicho nada y no pasaba nada.

Yo seguía alucinando. Primero me monta el pollo, luego quiere que el tema desaparezca. ¿A que estamos jugando? ¿Quién se creía que era yo?

¡Vamos! ¿Qué pensaba el vicepresidente que me iba a quedar de brazos cruzados? ¿O es que era verdad y quería amilanarme?

Sea como fuere mi actitud la tuve muy clara. Pero pienso que él no esperaba mi reacción de llamar a los que él me había nombrado. Una vez más me sentí subestimado. Una subestimación que yo pensaba que con el tiempo iría desapareciendo pero vistos los hechos en las preselecciones del año pasado con el consabido tema de una candidata amiga de una componente del jurado de un sector, parece que sigue en vigor. Este capítulo, por reciente, lo tengo muy fresco, aún conservo el correo que me puso en guardia. Pero todo a su tiempo.

La subestimación de parte de los que “mueven los hilos” de Junta ha sido un denominador común desde la creación de Música y Fallas Radio.

Pero esto, para mi, justifica algo que muchas veces Vicente Fayos me ha echado en cara, y no es otra cosa que me ha acusado de dar mucha información sin contrastar. Cosa que no es cierta.

Esta es la fecha que aún estamos por que alguien nos diga mentirosos por decir algo en antena que no es cierto.

La opinión es libre y no tiene porque coincidir con nadie. Pero en cuestión de hechos y noticias emitidas, todos los que participamos o hemos participado en los distintos programas durante casi seis años, estamos muy tranquilos. Nadie ha mentido. Por eso vamos muy tranquilos y salimos al aire con la tranquilidad de hablar de corazón, de sentimiento. Esto hace que no tengamos que recordar en que hemos mentido para en otro programa no decir lo contrario y que se nos vea el plumero. Ya sabéis aquello de que “se coge antes a un mentiroso que a un cojo”.

En algún momento he intentado que me dijeran algo, pocas veces por cierto, y la desconfianza ante mi llamada y los recelos que ha despertado posteriormente a lo que he relatado ha hecho que siempre haya buscado la noticia por fuera y me haya dejado llevar por el intento de que deje la información comprometida y me dedique solo a lo dulce, a lo bonito.

Yo siempre he pensado que para eso ya están los otros medios. Que si yo me pongo a informar y digo lo mismo que los demás ¿para que sirve?

Y esa es una cruz que siempre he llevado con ciertos poderes. Ser libre, decir lo que pienso, ser consecuente con mi conciencia y tratar de llevar la realidad, aunque sea cruda, a nuestros oyentes. Hoy por hoy sigue siendo así y así lo estamos contanado.

En más de una ocasión me “han invitado” que siga una línea tranquila. Y yo por dentro me he reído y pensaba “cuando me dices esto es porque algo de lo que te digo no te gusta, amigo”.

Después del episodio de la llamada me preguntaba que qué es lo que sucedía. ¿Quién me había metido en este lío? ¿Quién había contaminado mi llamada y por qué? ¿Qué interés había en que yo me viera metido en líos de este tipo? ¿Qué estábamos tocando en la fiesta que ciertos poderes estaban tan molesto conmigo que intentaban desestabilizarme?

Con el tiempo he ido descubriendo cosas. Pero os digo que aún me quedan muchas por descubrir. Y otras que he descubierto que nunca contaré porque, aunque os parezca paradójico y el paso del tiempo pueda haber mitigado, si las sacase al aire me perjudicaría mucho a mi, no cambiaría nada y encima me crearía muchas enemistades. Más de las que tengo.

Una de las personas que siguen este blog y que vivió con nosotros los primeros años muy de cerca como oyente, me ha dicho que hay cosas que me callo. Si, es cierto, y puede que si este blog-libro me cree enemistades o alguien intente poner en duda lo que digo, saque algunas al aire. Pero es que pienso que hoy por hoy, con lo que estoy contando y lo que llevo dicho en los 23 capítulos que habéis podido leer, es suficiente para dar mi versión de unos hechos que llevo años oyendo en mi contra sin darme la oportunidad de defenderme o mostrar mi opinión al respecto.

Estos comentarios me crearon una fama que aún a día de hoy, algunos que tengo en contra de esta primera oleada de oyentes, siguen pregonando y que ha llegado la hora de decir ¡Basta!

¿Alguien está dos años, tres, cuatro o cinco, trabajando en un sitio sin cobrar? Si es así o una de dos, o es tonto por estar tanto tiempo trabajando sin cobrar, o es mentiroso. Sobre todo cuando guardo los resguardos de los cheque y las transferencias realizadas a ciertas cuentas.

¿Alguien piensa que si una persona que quedo con ella para que me haga una colaboración determinada, le digo que pase a cobrar posteriormente, desaparece y no sé nada de él, no viene para nada y aún se lo debo (cantidad pequeña) es para que vaya diciendo que soy “un ladrón”? Yo, cuando alguien me debe dinero, aunque sea poco a poco, le pido que me lo vaya pagando. Ya sabéis el dicho de “no hay malos pagadores, sino malos cobradores”.

¿Alguien ve normal que quede con una persona que trabaja para mi con que le voy a liquidar de una manera determinada tras varios años trabajando en la empresa y a los pocos días reciba una carta de Trabajo porque un allegado suyo es “sindicalista de la EMT” y le coma la cabeza al estilo de los sindicalistas y me denuncie, cuando había cobrado siempre?

Son varios hechos que me van quemando y van minando mi confianza en cierta gente y en ciertos hechos. Y que encima sea gente de fuera de la emisora quien te cuente esto porque se dan cuenta de la terrible injusticia te subleva aún más.

Pues bien, aún hoy en día hay quien piensa que no pago a nadie (seis años en antena y que bueno soy que sin pagar a nadie sigo haciendo mi programa todos los días y sigo teniendo gente que me trabaja).

Más de uno de los que hablan así de mi se tenía que dar una vuelta por si mismo y pensar que hacía mientras que yo me tiraba horas y horas tratando de controlar todo en la emisora, la parte administrativa, personal, tesorería, programación, periodismo y todo lo que rodea a una empresa de este tipo, mientras que esta o estas personas se dormían en el desempeño de sus funciones o aprovechaban para enviar datos de la empresa a su correo o contar lo que pasaba por Messenger (que entonces estaba de moda, aún no había ni Facebook ni Twitter) o contar en la calle todo lo que pasaba dentro de una forma totalmente distorsionada. Y pruebas y testimonios de lo que acabo de contar tengo.

Obstáculos y obstáculos que sigo aún hoy en día intentado superar. No puede permitir que una persona que aún se cree las mentiras vertidas sobre mi, sin ni siquiera darme la oportunidad de dar mi versión, le diga a un actual colaborado mío aquello de “pero Pepe te paga todos los meses”.

Esto ha sucedido hace muy pocas semanas.

En el próximo capítulo comentaré un episodio en el que no tuve nada que ver con Julio Tormo y Begoña de la Concepción, pero que el hecho que sucediera en un programa mío hizo que alguien me acusara de dejar hablar a “todo el mundo”.

jueves, 23 de agosto de 2012

Capítulo 22. LAS FALLAS DE LA SEMANA DESPUÉS. NUEVAMENTE ENFRENTAMIENTO CON LOS MEDIOS.

Después de las fallas 2008 seguí descubriendo otras facetas de las fallas que no conocía en profundidad. Sobre todo a las fallas de “la semana después” como puedan ser Turís, Chiva, Monserrat, Montroy, Real, Segorbe o La Raval de Alcacer.

Lo primero que contar es lo que sucedió en Turís. En esta población, quizá la más popular de todas falleramente hablando de la semana después de fallas, se tiene por costumbre celebrar una cena previa a las fallas donde se invitan a los medios de comunicación.

Era la primera vez que yo iba. Allí estaba el “núcleo duro” de los medios de Valencia. En banda, en manada. Y cuando llegué yo, en Turís ya estaban advertidos. Me situaron en una mesa donde estaban los artistas falleros municipales de Turís y otras personas ajenas a los medios.

Aunque no me sorprendí, si que pregunté que era lo que pasaba. Me dijeron que les habían advertido de los problemas que teníamos. La “guerra de los medios” se estaba recrudeciendo por momentos.

Precisamente fue Braulio Torralba quien cogió el micrófono cuando tocó el turno de los medios y soltó otra perorata similar a la que soltó en Zapadores en los premios Desgarrats y dijo algo así como que agradecía a los medios “profesionales” que son los que están a la “izquierda” de este lugar (habréis adivinado que yo estaba a la derecha) que son los que realmente informan, bla, bla, bla.

En ese momento me dio risa. Éramos sobre 400 personas con la fallera mayor de Turís, la corte, la alcaldesa Pilar, los concejales, invitados, representantes de todas las fallas de Turís, etc. Y casi nadie sabía de que iba el tema. El caso que se le hizo fue nulo. A mi me saludaron todos… menos ellos, claro. La normalidad el resto de la noche fue total. Yo aún no era muy conocido fuera de las fallas de Turís, y menos las fallas conocían nuestras cuitas mediáticas. Yo no dije nada por esta razón, y los pocos que lo sabían también callaron.

La disertación de Braulio pasó desapercibida. Tanto que nadie habló de ella. De todos los que había, tan solo sabían de qué iba el tema unas 20 personas. ¡Y todos de Valencia! Una tontería más.

La velada terminó sin más problema. Todo lo contrario, no gustaron estas formas según me contarían al año siguiente. Un año en el que fue decreciendo esta asistencia de los medios y la popularidad de éstos. Una popularidad que fue reducida en parte por el despliegue que año tras año realizamos en estas poblaciones que plantan en la semana después. Donde entrevistamos a todas las falleras mayores de todas las fallas, alcaldesa, fallera mayor del pueblo y le damos cobertura y publicidad para que la fiesta se extienda por Valencia y nos sirva como “resopón” fallero a los que nos gusta las fallas.

Tras esa cena vino el resto de actos de las fallas. Pero algo si que tengo que contar para que vayamos enlazando sucesos internos.

La noche previa a la cremá se celebraba los castillos que cada falla disparaba ordenadamente cada media hora para que se pudieran ver todos por partes de los asistentes.

La noche era húmeda como corresponde a finales de marzo en la montaña. Para entonces Vicente Alventosa estaba de baja por problemas en la garganta. Unos problemas que arrastraba de antes de falla que provocaron que Vicente Sanz le sustituyera en los días de baja durante le programa de las mañanas.

A mi no me hizo ninguna gracia verlo pululando por Turís hasta altas horas cuando estaba de baja por estos problemas. Pero el ambiente interno ya estaba tan enrarecido que no dije nada, aunque con las miradas sobraban. El, claro, iba rodeado de sus “incondicionales”, los mismos que mientras que estaba Vicente Sanz llamaban para decir que donde estaba Vicente. Los mismos que con sus llamadas repetitivas y carentes de interés iban deteriorando el programa matinal. Los mismos que se quejaban de que había mucha publicidad y que ellos lo que querían era escuchar a Vicente y no escuchar publicidad.

¿Dónde se ha visto? ¡Unos oyentes diciendo a la emisora que no ponga publicidad! ¡Unos oyentes diciendo lo que había que decir y lo que no en la emisora!

¡Por favor! ¿Qué pretendían? ¿Qué se pensaban que era eso? ¿Por qué Vicente no les paraba?

La respuesta la tuve un par de meses mas tarde.

El malestar interno se seguía apoderando de la emisora. Y cuando esto pasa se traslada involuntariamente a la audiencia.

Mirad, en la radio, aunque parezca que no es así, el estado de ánimo de los que hablamos llega a los oyentes. Nuestra forma de expresarnos, nuestro tono, nuestras palabras, nuestra alegría en la voz, todo, absolutamente todo llega. Y es que en la radio lo único que llega a los oyentes es la voz. Y la voz dice mucho de las personas. No tenéis mas que analizar cuando habláis con alguien por teléfono que enseguida se nota como está o como se encuentra en esos momentos hablando por teléfono.

Así iba notando un progresivo deterioro de la popularidad de la emisora en general. Se iban conformando dos bandos bien diferenciados. Encima uno de ellos apoyado por ciertos medios que se habían confabulado y comenzaban a intentar destruir Música y Fallas Radio a través de intentar chantajear a las fallas y decirles que si yo iba ellos no iban a ir. Alguna si que cayó en la trampa, pero de esto hablaré en el próximo capítulo.

Lo que a mi no dejaba de sorprender es que cuando todo esto pasó, los compañeros de los otros medios defendían a su jefe, sin embargo en mi propia casa, no estaban de acuerdo conmigo, con mi línea editorial. Esto me parecería bien si hubiera guardado una coherencia y alguien me hubiera dicho: Pepe, como no estoy de acuerdo con tu línea editorial me voy.

Si me hubiera dicho esto alguien, lo hubiera entendido. Pero en lugar de decirme eso intentaba adueñarse de la emisora. Hecho que después de varios meses quedó claro, o mejor, clarísimo con la creación de una emisora tan fugaz como el cometa de Halley en la que la programación no me la imitaron, me la calcaron. Pero ya se sabe aquello de original y copia.

Después de Turís me tocó Chiva. Esta población nos acogió con los brazos abiertos. Era la primera vez que un medio de comunicación de Valencia le dedicaba tanto tiempo y se iba a su pueblo a pasar una noche de fiesta con ellos. El agradecimiento fue mutuo y a día de hoy aún sigo yendo todos los años a las fallas de Chiva, que lo suele celebrar la semana siguiente de las fallas de Turís.

Aquella noche, la atención fue tal que nos sentaron a mi mujer y a mí junto al alcalde y a los concejales. Desde entonces mantengo una excelente relación con Chiva y con todos los que han sido presidentes.

Cierto es que cada año nos acogen con mucha estima y les estamos muy agradecidos.

También entrevistamos en directo a los presidentes de Monserrat y de Real que quemaban la falla por aquel entonces. Recuerdo que el recorrido por la zona oeste de la comarca de la Ribera (Turís delimita la comarca de la Ribera Alta, por eso se habla valenciano y a partir de Godelleta y Buñol no porque son de la comarca de la Hoya de Buñol) de aquella noche fue pasado por agua, apenas pudimos ver las fallas por el agua. Incluso recuerdo que la falla de Real cayó por la humedad.

Pero es una tradición año tras año ir a estos pueblos las semanas después de fallas en Valencia. Y esperamos seguir yendo muchos años.

En el próximo capítulo hablaré de unos hechos ocurridos por aquella época con protagonistas como Julio Tormo, Begoña de la Concepción, Julio Torras, Gabi Aranaz o Rafael de Lázaro, entonces presidente de la agrupación Mestalla-Benimaclet.

martes, 21 de agosto de 2012

Capítulo 21. POLÉMICA EN LA ELECCIÓN DE LA FALLERA MAYOR 2008.

Tengo que volver al mes de febrero para comentar un hecho que fue comentado hasta en los programas nacionales de televisiones.

En la revista Actualidad Fallera se empeñaron en hablar de los desmanes del jurado de la fallera mayor en los números de noviembre, diciembre, enero y febrero. Tuvieron que ser cuatro artículos en cuatro números de la revista consecutiva para que saltara a la opinión pública. Y no fue por ellos.

Tras estas cuatro denuncias en las que insinuaba mal comportamiento del jurado de Gloria Martínez Amigó, se publicó en el diario Levante (otra vez el diario Levante) saltando a programas nacionales como el de Ana Rosa Quintana quien demostró un total desconocimiento de las fallas y una ignorancia impropia de una periodista nacional.

Los hechos que voy a comentar los he meditado mucho por varias razones. A los cuatro jurados implicados los conozco personalmente, casualmente el quinto jurado, la noche de los hechos no estaba porque había salido de viaje. Otra razón es porque todo son comentarios pero no se ha probado nada mas que lo que aportaron las chicas de la corte de ese año. Y luego las propias componentes de la corte de ese año tuvieron posteriormente un comportamiento sorprendente que luego relataré.

Supongo que muchos de vosotros lo recordaréis. La denuncia venía porque el comportamiento de los jurados en una noche determinada fue impropio. Se cuenta que después de ir a un karaoke terminaron la noche en una discoteca de Paterna donde estaba de “relaciones” un conocido componente de un medio de comunicación.

La velada parece ser que acabó como el Rosario de la Aurora, algunos de ellos bebieron mas de lo debido y las chicas tuvieron que llamar a sus familiares para que las recogieran.

El empecinamiento de Actualidad Fallera dio su resultado y al final explotó el tema.

Desde el programa defendimos que estos hechos había que denunciarlos con pruebas y si era posible en Junta para que se tomaran medidas.

Hay quien entendió esto como una defensa de los jurados. No era así. Nos dolía que esto saltara sin pruebas y sin posibilidad de que los jurados se defendieran. Se estaba haciendo un juicio paralelo de una gravedad importante sin saber lo que había sucedido. Bueno, si que se sabía por las declaraciones de alguna de las chicas que se vieron en el fregao total.

La imagen de las fallas quedó muy deteriorada. Parecía que para ser Fallera Mayor de Valencia había que acostarse con alguien del jurado.

Nuestra posición preocupó a los padres de las chicas de la corte hasta el punto que tuve una visita en la emisora. Los compañeros no sabían quien era. Me encerré con él y me dio una versión de los hechos. Lo cierto es que había cierta tensión, pero hoy en día nos vemos y nos saludamos con complicidad.

Otra cosas que no nos gustaba es que se les estaba diciendo a los jurados que casi eran delincuentes. Y conociendo a todos los jurados personalmente sabemos que no es así.

Se comenta que dijeron algunas frases reprochables. Pero no deja de ser mera especulación.

A todo esto sucedió algo que tampoco nos gustó en la emisora y hoy en día lo seguimos viendo mal por las formas y la permisividad de Junta.

Todos conocemos la férrea disciplina que Begoña de la Concepción en cuestión de las cortes. Por eso no entendemos que pasara lo que a continuación voy a relatar.

Era la exaltación de las falleras mayores de la agrupación del Marítimo. Se celebraba en el Palau de la Música como siempre. El presidente de entonces fue uno de los componentes del jurado polémico, no por el resultado si no por algunos modos. En alguna otra ocasión habían ido a un acto al Marítimo. Como por ejemplo la entrega de los Estandartes de los premios que celebra cada año la agrupación

Pues bien, después de haber asistido ese acto con el presidente del Marítimo tan solo quince días antes y sin nada que objetar, las chicas dieron dos besos al presidente José Manuel y le recogieron el ramo sin problemas llega el día de la exaltación, además estábamos en directo, y las cortes comienzan a desfilar y cuando llegan al centro del escenario, en lugar de darle dos besos al presidente y coger el ramo de flores, le cogieron el ramo casi sin mirarle a la cara y se retiraron hacía su lugar en el escenario.

La escena fue vergonzosa. No dábamos crédito. Habían estado antes con él sin problemas y ahora, como el escándalo había saltado a la opinión pública se dieron por ofendidas. No lo entendí. Y sigo sin entenderlo.

Primero que en ese momento José Manuel Herreras no era el jurado de fallera mayor, era el presidente una agrupación muy numerosa como es el Marítimo y ellas se debían a un protocolo, les gustase o no. El desaire y el desprecio se lo hicieron a toda la agrupación, no solo al presidente.Cuando dos semanas antes no habían dicho nada.

Segundo, aún no entiendo como se les permitió. Me contaron después que el vicepresidente de turno les dijo que era decisión de ellas. Cosa que nunca entendí. Pienso que se debían a un protocolo y lo tenían que cumplir. Ahí pienso que fue un grave error de Junta dejarles que actuaran así.

La única que si que cumplió y estuvo en su sitio fue Gloria Martínez Amigó, quien cuando subió al escenario, con elegancia, recogió su ramo, dio dos besos al presidente y saludó como en las falleras mayores es habitual.

Uno piensa, ¿Qué pasa, que la única que le dio dos besos fue Gloria? ¿Qué las de la corte no se lo dieron por lo que sucedió o por no haber sido elegidas?

Frases de aquellos días han quedado muchas en la opinión pública pero ninguna se ha probado. Como no se ha probado que hubiera conducta para imponerles una sanción o incluso delictiva. La Delegación de Incidencias acordó que lo único que había era reprochar los hechos a los jurados y nada más.

Fue un episodio lamentable. El jurado por actuar así. Junta por no saber manejar el tema en ningún momento. El medio que lo publicó por sacar al aire esto cuando otras cosas para mi peores no las ha sacado supongo que por amiguismos o al saber por qué. Las chicas de la corte de ese año porque en ese momento no estuvieron a la altura.

Los jurados desaparecieron del primer plano fallero y solo se libró un vicepresidente que el día de los hechos no estuvo en Valencia. Por su trabajo estaba fuera. Y hay quien se pregunta porque se elige a un jurado que no iba a poder asistir a todas las pruebas por razones de trabajo. Yo tengo mi teoría, pero es mía.

Como el tema lo había sacado Actualidad Fallera, ningún otro medio defendió la “presunción” de los jurados. Que es otro punto que yo defendí. Cuando sean formalmente acusados y se vea que han hecho algo que reprochar yo seré el primero que se lo reproche. Pero no fue así, el juicio paralelo y la opinión pública se saltó un derecho tan básico en términos jurídicos como es la presunción de inocencia. Para casi todos los miembros del jurado ya eran culpables sin haber iniciado ningún proceso de investigación.

Nosotros siempre dijimos que había que esperar. Por eso se nos acusó de defender a los jurados. Y lo único que defendí, y lo repetí varias veces, fue su presunción. Era la palabra de ellas contra la palabra de los jurados.

Y me hago más preguntas:

¿Por qué las chicas de la corte no denunciaron ante Junta estos hechos?

Si los denunciaron ¿Por qué no se tomaron medidas y tuvo que ser un medio de comunicación quien lo aireara?

¿Quién falló en todo esto?

En este tema quedó, una vez más, la sensación de oscurantismo de Junta como cuando Vanesa Romero, corte del 2006, faltó a muchos actos. Junta siempre la intentó tapar. Pero la sensación es que no se quiso dar mas escándalo del que se dio. Pero lo cierto es que actuando así, para mi y para muchos, es peor. Los falleros queremos las cosas claras. Y en estos temas no vimos nada de claridad. Y eso no gustaba, y sigue sin gustar cuando se tratan de tapar cosas que a la larga o a la corta salen.

Y este era uno de los temas que también hacía que nosotros molestáramos. Éramos el contrapunto de todo lo que sucedía y decíamos lo que muchos pensaban y nadie se atrevía. Eso no gusta en Junta. Pero somos así y seguimos siendo.

En el próximo capítulo seguiré por acontecimientos que sucedieron después de las fallas 2008.

lunes, 20 de agosto de 2012

Capítulo 20. KARINA. MÁS RECUERDOS PARA EL BAÚL DE MÚSICA Y FALLAS RADIO.

Era un sábado por la mañana. Vicente Sanz presentaba su programa “Tiempo y Ritmo”. Había conseguido entrevistar a varios famosos incluso nacionales. Ese día entrevistaba a Karina.

Maribel Llaudes que así se llama en realidad, con su dulzura habitual, atendió a Vicente y le contestó a todas las preguntas. Cuando llegó el final le preguntó que qué era lo que le faltaba por hacer, o unas de las cosas que le faltara.

Ella respondió que no había ido nunca a la Ofrenda a la Virgen a Valencia en fallas. Quedaba apenas dos meses para fallas.

De inmediato se ofrecieron creo recordar que hasta tres fallas. Por este orden estaban Pza. Rojas Clemente, Zapadores-Vicente Lleó,  y Santiago Rusiñol. Por orden de llamada se decidió la primera, Rojas Clemente entonces presidida por nuestro compañero Vicente Pardo quien sigue colaborando con nosotros desde otra comisión, Pérez Galdós-Calixto III.

Dicho y hecho. Se puso todo en marcha y a la invitación de la falla se unió la de la cesión del traje por parte de 1700 Indumentaria Valenciana cuando aún no se habían ido a la calle Joaquín Costa, aún estaban en Castellar y Art Antic, que se ofreció a ceder un aderezo. El tema de la indumentaria estaba solucionado.

Karina vio a Valencia (bueno, me fui adrede a Benicasim a por ella) y visitó las tiendas para ir tomando medidas. Participó en el programa de Vicente ya en directo y viendo la repercusión que había tenido me pidió hacer un programa.

Yo alucinaba ¡Karina pidiéndome hacer un programa a mi en mi emisora! Si, si. La de las flechas del amor, la del baúl de los recuerdos.

Le dije que si, que claro. Y acordamos que los jueves por la tarde, a partir de las 8 haría su programa. Vicente Sanz venía a hacer el control y ella se traía preparadas las canciones que quería que pusiéramos. Está claro que todas eran de su época. Siendo muy bien acogido por nuestros oyentes. El programa se grababa y se repetía el fin de semana. Ella venía en tren a Valencia, hacía el programa y dormía en Burjassot, en el hotel Trapemar que por entonces también era cliente.

Estuvo unas cinco semanas. En una de las visitas a la emisora fue la que eligió al azar la ganadora del primer traje de valenciana completo que sorteamos gracias a nuestros patrocinadores. Se conformó un traje completo y lo cierto es que el momento del sorteo fue memorable, pues se dieron cita casi todos los patrocinadores junto a Karina. La elegida fue María Angeles Díaz Iranzo de la falla Juan de Garay-Dr. Marañon.

Y llegó el último programa. A este vinieron invitados Emilio Solo y Javier Vila, que junto a Vicente y a la propia Karina hicieron un programa genial, muy bueno, incluso cantando en directo. Preparamos una cena y se hizo el programa.

Pero ahí noté algo que ya había sentido en otro momento. Me ofrecí a hacer el control y mi situación en el programa era de mera comparsa. En este momento me acordé de Enrique Ginés y le di la razón en una cosa. Si eres el director de una emisora y le cedes el protagonismo de entrevistar a los personajes famosos que pasan por la emisora a un empleado, éste se puede endiosar. Y yo caí en ese error. Recordando a la 97.7 veía que a las grandes figuras de la canción de España o de fuera, siempre era Enrique quien las entrevistaba. Nunca un empleado. Yo me equivoqué. Pero era una equivocación lógica. Si yo tengo a personas dirigiendo programas de radio, lo normal es que sean ellos quienes entrevisten a sus invitados. Por eso no me arrepiento. Pero le daba la razón totalmente al entonces director de la emisora “que trabaja por y para Valencia”, o trabajaba. Ahora no tanto.

Digo que era de comparsa porque cuando yo hacía algún comentario es como cuando alguien que no cae bien en una reunión se le escucha por cortesía pero no se le sigue y ves como los demás quieren ir a la suya.

Nuevamente veía como empleados míos les molestaba que yo estuviera ahí y preferían hacer sus programas sin que yo estuviera. Mantuve el tipo, no podía hacer otra cosa y también era el último programa. Lo tenía claro por dos partes. Porque estábamos en vísperas de fallas y porque en ese plan no iba a volver ya. A su edad se le hacía un poco pesado aunque solo le costara el tren de Madrid a Valencia y volver porque el hotel lo poníamos nosotros.

Mientras tanto llegábamos a fallas. Ella iba a salir a las 4 de la tarde. Era la hora que el sector Botánico tenía previsto su paso por la ofrenda. Abría ofrenda por la calle San Vicente. La fallera mayor de la falla Rojas Clemente, Vicen, invitó a desfilar a Karina junto a ella. Fue recibiendo aplausos por donde pasaba. Y llegó a la Pza. de la Virgen. En el momento de la entrada se anunció a la falla, pero no se dijo su nombre artístico. Se dijo: “En este momento hace su aparición la fallera mayor de la falla Pza. Rojas Clemente acompañada de Maribel Llaudes”.

¿Maribel Llaudes? Algo no me cuadra. El año pasado Carmen Sevilla desfiló con la falla Na Jordana. Se hizo rueda de prensa, apareció en todos los medios, se hicieron actos, etc. Ahora Karina, que aunque no es Carmen Sevilla si que es popular, se obvia totalmente, ni siquiera en la megafonía de la plaza se dice su nombre artístico cuando a Carmen Sevilla si que se le nombró como tal en lugar de su nombre María del Carmen García Galisteo. Pues pasó lo que pasó y es que en la plaza pasó desapercibida.

Luego, cuando llegó, la acompañé a algunas televisiones, aunque Canal 9 no hizo mucho por entrevistarla. El desprecio fue casi total cuando con Carmen Sevilla su atención había sido grande.

La acompañé a saludar a Félix Crespo quien la recibió con su habitual cortesía. Pero la mirada de Begoña al verme llegar con ella fue de “Ya está este aquí, Félix”. Eso si, la atención fue exquisita por parte de los dos.

Pero otro episodio lamentable sucedió cuando estábamos esperando a que llegara la falla Rojas Clemente con Karina.
Como entraban por la calle San Vicente, nos pusimos a esperarla a la salida, junto a las cámaras de televisión. De pronto vemos a una persona de la delegación de medios (que casualmente esta persona el año pasado intentó dos tonterías con nosotros en dos preselecciones pero las dos le salieron mal, y no lo nombro porque no se merece salir aquí y para mas INRI fue a quien le enseñé la grabación de Marta Reglero. ¡Vaya puntería tuve el primer día!) que se nos acerca y nos llama la atención. Que allí no podíamos estar. Que nos teníamos que poner en la zona habilitada para los medios.

¡Pero si estaba junto a los de Canal 9! ¡Si no molestábamos! ¡Si sabían que era para recibir a Karina!

¡Aaaaaahhhhhhh! ¡Claaaaaaaaaaro! ¡Que era eso!

Karina no podía hacer como Carmen Sevilla y no se podía parar la ofrenda como con Carmen. No se podía arrodillar para rezar. No era tan teatrera ni la había traído una falla de Especial ni un medio de comunicación amigo. ¡Nooooooooooo!

La habíamos traído nosotros junto a una falla humilde y no se merecía lo que el año anterior se le permitió a Carmen Sevilla.

¡Claro, claro, claro! Y encima nosotros estábamos por el medio. ¡Ya está Claro!

Mi contestación fue clara. “Que tu no eres quien para decirme nada, y dile a quien te ha enviado que me lo diga a la cara y que me explique porque otras personas de otros medios pululan constantemente por toda la plaza y no les llamáis la atención y están toda la tarde de un lado para otro y yo que estoy diez minutos molesto aquí”.

Persecución total. Otra más de la delegación de medios. Otra prueba de los agravios comparativos que se suceden contra Música y Fallas Radio y todo lo que le rodee por parte de una delegación que en lugar de defendernos. Pero para entonces ya estaba acostumbrado y, después de pasar por varias televisiones (entonces habían 6 ó 7) la llevé a Canal 9, nos dijeron que había que esperar más de 20 minutos. Karina dijo que ella no podía estar tanto tiempo de pie. Para entonces la comisión ya se había ido de la plaza y optamos por acompañarla al casal que, afortunadamente, está cerca de allí, en la misma Pza .Rojas Clemente. Canal 9 pasó de ella, Paco Nadal estuvo bastante prepotente. Pero bueno. Habíamos cumplido la misión.

Y después del hecho nos fuimos hablando con ella y mucha gente que pasaba por la calle Caballeros la reconocía y nos pedían hacerle una foto. Ella, Karina, accedió sin ningún problema.

Luego a cenar en el casal, nos ofreció una actuación con unas diez canciones y la llevamos al hotel, que su edad ya no permite mucha juerga de noche.

Un episodio muy agradable que iba aclarando la postura de la gente cada vez más. Tanto de la gente de la emisora como de alguna gente de la delegación de medios. Una delegación de medios de Junta que a día de hoy tengo una buena relación con todos ellos menos con el delegado. Las personas que mostraban mas hostilidad hacía nuestra emisora ya no están. ¿Coincidencia? Pienso que si. No sé.

Tengo que decir que este hecho no empañó las fallas 2008 que se presentaron bastante tranquilas. No hubo mucho más que comentar que la retransmisión de las mascletás por primera vez por nuestra cuenta. Para entonces ya tenía todo lo necesario para poder hacer las retransmisiones sin problemas. Técnicamente estaba todo en marcha.

Para entonces Antonio Descalzo ya estaba con nosotros y su “Voz Granota” al mediodía que suponía otra curiosidad: éramos la única emisora que dedicábamos un programa de dos horas diarias al Levante UD y no teníamos ningún programa del Valencia CF. Y eso que aún estaba en Segunda.

En el siguiente capítulo hablaré de los meses críticos después de fallas. Críticos para la estabilidad interna. Porque a todo lo que he comentado la programación continuaba y los programas iban saliendo como si nada. Pero la relación con varios colaboradores no era la misma.

Capítulo 19. DICIEMBRE 2007. EL MES DESPUÉS.

Tras la tormenta viene la calma. Pero los efectos de la tormenta se ven mejor con esa calma. El terrible mes de noviembre iba a dejar una huella que no nos ha abandonado.

Después de un año de graciosos, pasábamos a ser polémicos. Sin término medio. Y esta vitola la mantenemos. O mejor la mantengo. Porque con Vicente ya no fue lo mismo. La línea editorial de la emisora varió ostensiblemente y eso creo contratiempos internos. Unos contratiempos que también marcarán el devenir de la emisora de los cuales no tuve noticias fehacientes hasta el mes de julio, pero que detalle tras detalle, me iban dando información de lo que se iba cociendo.

No hay que ser muy avispado para ver y notar indiferencia o cambios de actitud en personas que habías tenido junto a ti mucho tiempo. Pasar muchas horas juntos trae que al final los movimientos y el lenguaje extra-corporal te vayan diciendo mas cosas que las palabras. Pasa en las parejas y pasa en los grupos humanos de trabajo con los que se comparten muchas horas.

Y así sucedió. Mi nueva postura ante el mundo de las fallas no era compartida por parte del equipo. Pero mi situación fuera de un grupo determinado la vi clara en la entrega de los premios del concurso “Gran Fallero” quienes, supongo, que al leer esto se extrañarán de que no dijese nada en el momento. Pero empezaba a recopilar datos sobre lo que se iba cociendo.

Era la semana de Navidad. La cita era en la falla Joaquín Costa-Burriana. Era una noche fría. El casal estaba en la misma esquina de las dos calles. El presidente era Rafa Ramírez, uno de los participantes en las tertulias del mediodía quien ofreció su casal para celebrar el acto.

Hasta ahí todo bien. El recibimiento a mi mujer y a mi fue normal, no es que fuera muy efusivo, pero tampoco fue hostil.

Dejamos el coche en doble fila pensando que una noche, navidades y el frío que hacía, la grúa no haría aparición.

Pero nos equivocamos. Mi coche ya estaba enganchado. Me tocó pagar 30 euros para que me lo desengancharan. Una ve devuelto el coche opté por meterlo en el parking que hay en la calla Burriana esquina con Maestro Gozalbo.

Mi sorpresa vino cuando llegué del parking y el acto de entrega ya había comenzado. Ya estaban ellos a la marcha como si yo no existiera, como si mi presencia no fuera necesaria.

La situación es que yo era el director de la emisora, una emisora que tenía un programa, un programa que puso en marcha un concurso, un concurso dirigido por un empleado de la emisora que yo dirigía y que había comenzado el acto de entrega sin mi presencia, pasando totalmente de mi.

Aquello fue el inicio de una puesta en guardia. No les importaba lo que yo pensara. No les importaba lo que yo dijera. No les importaba que yo estuviera o no. Ellos iban a su bola.

Se habían formado un grupo de amiguetes a la sombra de la emisora donde lo de menos era si el programa era bueno o era malo. Donde lo de menos era que pasaba y que pensaba yo que la dirigía. Lo que importaba era que los amiguetes fueran los protagonistas de cada programa y que, obviando las reglas y normas básicas de una emisora, hacían de su capa un sayo llamando a cualquier hora y atreviéndose a criticar hechos internos que nunca debieron de salir en público.

La corrupción interna de la emisora había comenzado hacía algunas semanas. Pero este hecho de tenerme marginado en una entrega de premios me dio la señal de que algo estaba pasando.

Mi incomodidad en el acto fue proporcional al ninguneo al que fuimos sometidos mi mujer y yo, quienes apenas entrábamos en ninguna conversación. Era un grupete en el que estábamos por compromiso y en el que el “jefe” no era yo. Solo nos llamaron para estar y nada más.

Al final, “me dejaron” hablar y expuse agradecimientos de cortesía pero con un mal humor digno de coger la puerta y haberme ido. Mantuve el tipo porque las ganas de irme eran iguales a las ganas de quedarme haber hasta donde llegaba el pasteleo y poder seguir recogiendo datos.

La ruptura interna se había materializado. Pero nos necesitábamos, yo para seguir con el programa concebido más de un año atrás, y ellos para poder seguir haciendo su grupo de amiguetes y quedando fuera de la emisora llamando en antena y públicamente quedando contando lo que habían hecho.

Era un club social radiofónico. Vamos, que hasta en eso fuimos pioneros, creo yo.

Esto era en el programa de las mañanas. Un programa que cada vez carecía más de calidad siendo repetitivo y sin un guión determinado. Un programa en el que los oyentes eran los que iban haciéndolo y en el que eran los mismos cada día. Los que en la falla Joaquin Costa-Burriana cenaron en el acto de entrega que he comentado anteriormente.

Era una situación difícil, muy difícil. A lo vivido en noviembre en tres frentes distintos se unía los problemas internos.

Reconozco que no tuve valor para tomar una decisión salomónica pues no tuve claro si era positivo o negativo.

Supongo que no lo hice porque de momento se veía compensado con el reconocimiento que teníamos en el exterior donde cada vez mas los oyentes se implicaban en el programa de la tarde. Oyentes distintos y serios que participaban activamente pero no era lo único en lo que se basaba el programa.

Por aquel entonces me invitaron a participar como mantenedor de las falleras mayores de Albal. Era mi segunda experiencia después de la vivida en febrero en la agrupación de Jesús donde fui invitado por primera vez en mi vida. Nunca antes había sido mantenedor. Pero Jesús y después Albal me invitaron. Lo agradecí mucho.

Era una señal positiva de lo que si iba viendo. Y era un aumento de la popularidad en las juntas locales por ser el único medio que íbamos a retransmitir las exaltaciones y actos en los pueblos. Así forjé muchas amistades que aún hoy en día mantengo en juntas locales aunque estos no ejerzan. Su sinceridad y amistad incondicional son muy reconfortables. Lo mismo que la amistad que conservo con presidentes de falla y de agrupaciones de entonces y de ahora que me ayudan y mucho en el desempeño de mi labor informativa aconsejando y poniéndome en el camino de informaciones de su falla o de su agrupación.

Aunque esta simpatía y popularidad no era recogida en la misma medida por las fallas de Especial quienes me saludaban y me atendían siempre con amabilidad pero sin esa espontaneidad que me mostraban las fallas de menor categoría o de los pueblos. Pero no tengo quejas de ellos… después del episodio de Chimo Díaz del capítulo anterior.

Bueno, de Especial de la Federación, porque las tres fallas de la AFE siempre nos han estimado mucho y nos han tenido cerca. Merced, Archiduque Carlos y Malvarrosa si que han cumplido los métodos de las fallas “inferiores”, en ellas me he sentido muy a gusto.

Estuvimos en la presentación de los bocetos en directo en la sede de la Federación de Hostelería (paradójico con lo que se está viviendo hoy) y esto creo que no sentó muy bien a la Federación de Fallas de Especial.

También estuvimos en el acto de entrega de los premios I+G de la Federación de Fallas con Especial Ingenio y Gracia con quienes entonces mantenía una excelente relación pero con los que luego también tuve un episodio decepcionante.

Las ventas en publicidad eran buenas y eso nos daba alegría para ampliar la plantilla de trabajadores quienes se incorporaban para desarrollar trabajos tanto administrativos como en antena.

Sin darme cuenta, la solidez de la programación iba en la misma medida que la degradación interna. Hecho que no me era ajeno pero que prefería trabajar para ver si se podía enderezar. Pero cuando la gente no es honesta y te da una cara, si algún mes los cobros de publi de los que nos nutríamos se demoraban y le dices a una persona que te pago la mitad ahora y la otra mitad la semana que viene diciéndote que bien y luego sale de la emisora y da otra cara cuando los amigos le dicen si se van a comer juntos y dice que no porque no le he pagado dejándome en mal lugar, creando una imagen de mi negativa, cuando la gente hace esto es muy difícil enderezar la nave porque luego te vienen las leches por donde no lo esperas.

Y eso duele. Que confíes en personas que luego a tus espaldas te critican, te ponen a parir y no se dan cuenta que va perjudicando la imagen de la emisora que les da de comer, es muy duro. Tan duro como que acuerdes que le vas a prorratear pagas y sueldo, aunque luego le vayas a dar las nóminas por separado y cuando deja de trabajar te denuncie porque no ha recibido el dinero. Cuando juntando los “cheques” y transferencias (documentadas) sumas y ves que le has pagado más de lo que debías de haberle pagado y cuando ya no está en la emisora te denuncia ante Trabajo para reclamarte unas cantidades ya cobradas. Y lo peor es que te pongan verde con mentiras comprobadas y demostradas por gente de dentro de la emisora que me tenían que defender ante algún “compañero” suyo. Aún hoy en día hay gente que se cree esas mentiras. “No hay mas ciego que el que no quiere ver”.

Eso te va dando idea de que tipo de personas vas teniendo a tu lado. Pero esto no se ve de un momento a otro.

En el próximo capítulo la protagonista será Karina. Con ella mas muestras de que “yo llegaba a molestar”.

domingo, 19 de agosto de 2012

Capitulo 18. LA “TODOPODEROSA” FEDERACIÓN DE FALLAS DE ESPECIAL.

Entre todo lo que he contado en los dos capítulos anteriores, se me vino encima un hecho que me sorprendió y puso a prueba mi capacidad de improvisación.

A finales de ese mes de noviembre se celebraba la “Festa per a Tots”. La presentación de bocetos de las fallas de la Federación de Fallas de Especial.

A través de una persona de la federación que aún hoy en día no se sabe públicamente quien fue a pesar de que muchos apuntaban a una persona determinada, conseguí entradas para esa fiesta. Y lo mismo que sucedió cuando lo de Art Antic, “alguien” escuchó que las íbamos a regalar y de inmediato le pasó parte a Chimo Díaz, presidente de la federación de la falla Exposición y este me llamó para decirme que no las sorteara entre los oyentes pues de lo contrario no me dejarían retransmitir en directo. Otro ataque de celos de, posiblemente, algún medio de comunicación.

- ¿Queeeeee? ¿Qué no me dejarán retransmitir en directo? ¿Pero quienes os habéis creído que sois para chantajearme? Esto es para comentarlo en directo.

Le dije a Chimo, supongo que descolocado porque un medio le rebatiera y no le lamiera el culo para poder tener los parabienes de las fallas de Especial.

- A mi me da igual que lo digas en público. Como si lo quieres publicar donde sea.

Me dijo Chimo como despreciando el poder mediático del programa.

- He realizado una reunión de urgencia con todos los presidentes de la Federación y todos me han dado la razón. O me dices quien te ha dado las entradas o no te dejamos retransmitir.

- Pues ahora soy yo el que no voy, Chimo. No quiero retransmitir la fiesta y que sepas que no voy a ir. No me importa lo que hagáis en la inauguración. Así que haced lo que queráis.

- Haz lo que quieras. Pero la decisión está tomada.

Esto era las dos de la tarde. A las cuatro empezaba el programa. Obviamente todos estaban pendientes de lo que iba a decir. Hablé con la persona que me las había facilitado y le expliqué lo sucedido. Me dijo que las entradas estaban numeradas y si las localizaban sabían quien había sido el que me las había dado. Tomé la decisión de no sortearlas. Pero como las había anunciado tuve que explicar el porque no las sorteaba.

La prepotencia y chulería con la que Chimo Díaz me había hablado era propia de quien pensaba que por ser de Especial me iba a doblegar y me iba a arrastrar ante ellos. ¡No me conocían!

Comenzó el programa. Lo primero que hice fue decir que la Federación de Fallas de Especial me había chantajeado y no me dejaban retransmitir en directo si no les decía quienes me habían dado las entradas. Por tanto no iba a realizar el sorteo porque sería dejar en evidencia a una persona que de buena fe y con la mejor de las intenciones, me había dado entradas para regalar a los oyentes.

No me iba a dejar chantajear por nadie y menos por tan solo diez fallas aunque fueran de Especial. Dije que mi decisión estaba tomada y que anulaba la retransmisión de la inauguración de la Festa per a Tots por estos motivos.

De inmediato la llamada de Chimo Diaz. Yo pensé ¿pero no decías que no te importaba y me hablaste con desprecio cuando me dijiste que te daba igual que lo dijera en el programa?

Esta llamada no hizo más que darme la razón, y lejos de mejorar la imagen de Chimo en particular y de la Federación en general, lo que hizo fue estropear porque no sé si es que pensaban que no me iba a atrever a hablarle en público igual que lo había hecho en privado porque “eran las fallas de Especial”. A mí, que los divos y gurús de cualquier actividad me revuelven las tripas, los de las fallas aún me caen peor cuando van de prepotentes. Este era el caso de Chimo Díaz. Y me rebelé.

Le volví a decir que no me iba a dejar chantajear a pesar de que me intentó decir que si le decía quien me había dado las entradas me dejaban retransmitir.

- A ver, Chimo. Que mi decisión de no retransmitir está cerrada. Y aunque ahora me dejaras hacerlo, o me dejarais hacerlo no lo voy a hacer. Que no acepto de nadie las formas con las que me habéis tratado. Y por supuesto te aseguro que nunca te vas a enterar quien me dio las entradas. Que lo tengas claro.

La conversación terminó y un nuevo enfrentamiento se había producido con un poder de la fiesta.

Una vez más quedó demostrado que los poderes a mi me daban igual. Que quien me la hace me la paga. Me da igual quien sea. No aguanto los que se creen por encima el bien y del mal. Y las fallas de Especial para mi no son ni más ni menos que las demás. Y esa tarde quedó claro.

Más tarde me enteré que la reunión improvisada en un bar de enfrente (sin saber quienes estaban allí para escucharlos) fue una pantomima de Chimo Díaz.

- A ver, Música y Fallas Radio tiene unas entradas que va a regalar, nadie sabe quien se las ha dado. Eso va en contra del espíritu de la entrega de entradas a las fallas de la federación. Propongo que no se le deje retransmitir en directo. ¿vale?, ¿Toni, Pere, José Luis, Rafa, José, Julio, Pepe, Jesús, Bernardo?
- Bernardo no está.
- ¿Aceptáis?
- Vale.

Dijeron todos sin saber muy bien de que iba el tema. Es más le dijeron a Chimo que “tu sabrás por donde van los tiros”.

Pero el ridículo y estaba hecho y mi decisión ya estaba tomada. Ni iba a ir y no iba a ir. No había que darles mas vueltas.

Si alguien pensó que no retransmitir era un castigo o una medida para mí, lo cierto es que se equivocaban. O igual es que los otros medios les habían hecho creer algo que no eran y pensaba que yo iba a lamentarme y me iba a sentir mal. Cuando acabó la conversación con Chimo me sentí como que había ganado una batalla a la prepotencia y la chulería manifiesta de una persona que aún hoy en día hay quien se explica como fue presidente de una falla de Especial.

Al día siguiente me presenté como público para entrar a verla. Por que una cosa es que no fuera a retransmitir la inauguración y otra que no me gustar ver la exposición, que a cualquiera no le gusta. Claro que iba a ir a verla.

En la puerta me encontré a Bernardo Morosoli, que os recuerdo que estaba haciendo un programa los lunes, y entramos juntos a ver la exposición. Las habladurías de vernos juntos se multiplicaron. Pero nadie se atrevió a decirle nada entonces. Vi la exposición y saludé a casi todos.

En la reunión posterior a la Festa per a Tots, cuando empezaron a preguntar quien me había dado las entradas, todos, los diez presidentes, dijeron que no. Que ninguno de ellos era.

- ¿Y ahora que hacemos? Preguntó uno de ellos.

El silencio fue total. Habían quedado en la más absoluta evidencia.

Tengo que hacer una observación. Para entonces venía a hacer programas de la falla Na Jordana, de la falla L’Antiga, de la falla Nou Campanar, de Sueca-Lit. Azorín, se anunciaba conmigo un vicepresidente de Convento, había entrevistado en dos ocasiones y tenía una muy buena relación con Almirante Cadarso.

Y en la reunión que dijeron que no había sido ninguno de ellos puede que tuvieran razón. A lo mejor no había sido ninguno de ellos. Y todos tenían razón. Pero eso queda para mi intimidad. Aún guardo las entradas. Si ellos tienen el listado de los números de las entradas de entonces puede que algún día lo sepan y lo entenderán perfectamente. Pero hoy por hoy, y pienso que por mucho tiempo, aún queda el misterio de quien me dio las entradas nunca repartidas.

Esto le costó el puesto a Chimo Díaz. Bueno, esto y alguna otra cosa, no voy a ser pedante. Pero si que sentó muy mal cuando el tema fue destapándose.

Al año siguiente, siendo presidente José Juan Giménez, de Cuba-Lit. Azorín. Me llamó para hacerlo en directo. Le dije que no, que nadie me había apoyado el año anterior y que no lo iba a retransmitir. Aún estaba dolido con la actitud de los presidentes de la Federación. En el año 2009 si que estuve en directo.

Terminaba un mes tremendo. Un mes que había provocado un enfrentamiento con tres poderes fácticos de la fiesta. Pero lo más importante es que para el gran público en los tres casos tenía razón y me apoyaban. Veían que mi actitud había sido valiente y no me había doblegado a ningún poder. Ninguno me había hecho incar la rodilla. Y la emisora se vio reforzada. La batalla había dejado heridos por el camino pero nuestras heridas curaron muy rápido. Otras aún perduran para otros.

Mi autoestima tras estos tres envites subió muchos enteros. Nunca esperaba que llegara estos momentos, pero llegaron y los superé con nota. La muestra está en que a pesar de lo sucedido el camino de Música y Fallas Radio siguió como si nada.

Después de la tormenta viene la calma. Tras el tormentoso mes de noviembre vino diciembre. Solo quedaba una reunión pendiente, la de Fayos con Gabi en el despacho del secretario general.

La Navidad 2007 venía tranquila. Por cierto recibí la invitación de la AFE (Asociación de Fallas de Especial) para retransmitir su presentación de bocetos sin condiciones y la de la Federación de Fallas con Especial Ingenio y Gracia para el día 28 de diciembre.

En el próximo capítulo hablaré de algún detalle que debido a la vorágine, he dejado para momentos más tranquilos. Como la entrega de la primera edición del concurso El Gran Fallero que también tuvo su miga.